Argentina está en semifinales del Mundial de Qatar tras haber ganado a Holanda en los penaltis. Nahuel Molina y Messi dieron ventaja a la albiceleste, que vio como Weghorst empataba para los de Van Gaal en el tramo final. Finalmente, tuvieron que vencer en una emocionante tanda de penaltis. En la penúltima ronda les espera Croacia, verdugo de Brasil.

Comenzó el partido con Argentina tratando de dominar y encimar la meta holandesa, pero con poca profundidad. Las ocasiones escaseaban y el encuentro empezó a bajar las marchas de intensidad. Un toque, dos toques, tres toques y cero profundidad. Un bello homenaje a una España que ya no está. Alguna acción aislada encogía los corazones naranjas y albicelestes, pero poco más. No pasaba absolutamente nada y hasta la granda, ampliamente argentina, empezó a silenciarse.

Entonces llegó el minuto 35, Messi cogió la pelota en tres cuartos de campo, encaró, ojeó y puso un pase que sólo un genio puede dar para que Nahuel Molina, previo toque de Van Dijk a la pelota, definiese a la perfección poniendo a los de Scaloni por delante en el marcador. Hasta ese momento no había pasado nada, pero Argentina tiene a Leo y eso, habitualmente, te suele dar ventaja.

Tras la diana, el animoso público argentino empezó a escucharse de nuevo, mientras que Holanda decidió que tenía que poner algo más sobre el césped de Lusail si quería igualar una eliminatoria que ya se les había puesto complicada. Lo intentaron con acciones a balón parado, pero no fue suficiente para devolver las tablas al marcador antes del descanso.

Al comienzo de la segunda parte Van Gaal hizo dos cambios. Las cosas no estaban funcionando y tocaba agitar el equipo. Berghuis y Koopmeiners entraron por Bergwijn y De Roon. Pero la realidad es que poco varió el encuentro estos movimientos. Si bien es cierto que los naranjas pisaron campo argentino con frecuencia, las ocasiones no aparecían. De hecho, la mejor la tuvo Messi con un disparo de falta a los 63 minutos que por el efecto óptico hizo que medio campo gritase gol.

Llegando al minuto 70, Dumfries cometió un claro penalti sobre Acuña que Leo Messi, con una tranquilidad pasmosa, se encargó de transformar para hacer el 0-2 y poner más tierra de por medio, aunque no iba a ser suficiente. Como ante a Australia, a Argentina le tocó sufrir en los minutos finales, pero esta vez sí lo terminó pagando.

Weghorst, que había entrado cinco minutos antes por Depay, recortó distancias con un gran cabezazo para una Holanda que ya no iba a dejar de creer. Antes del drama argentino, Paredes formó la primera gran bronca del partido dando un pelotazo al banquillo. Después, se formó tremendo quilombo. Mateu descontó 10 minutos y a los de Van Gaal se les abrió el cielo. Remaron y remaron hasta que en el 99′ Pezzella hacía una falta en la frontal que los neerlandeses ejecutaban a la perfección.

Los chicos de Van Gaal tiraron de jugada ensayada para forzar la prórroga. Weghorst, otra vez, recibió un pase interior, se revolvió y cruzó la pelota para hacer el empate a dos. Se consagró el milagro Oranje, que sólo había dado el nivel durante 20 minutos. Eso sí, suficientes para forzar una prórroga tremenda.

Antes del tiempo extra, ambos equipos se volvieron a enzarzar en una segunda tangana. La tensión en el verde de Lusail era muy grande. Después, la pelota echó a rodar y en el tiempo extra Lautaro y Enzo Fernández tuvieron los goles de la victoria, pero la fortuna no les sonrió. Y para rematarlo, Otamendi estrelló una pelota en el palo en el último minuto de la prórroga. No había tiempo para más y el duelo se decidió en los penaltis.

Llegaron los penaltis y Van Dijk erró el primer lanzamiento de Holanda. Messi, con toda la calma del mundo, no falló el suyo. Los de Van Gaal también fallaron el segundo. Leandro marcó para la albiceleste. Marcó los dos siguientes la Oranje, falló Enzo, convirtió De Jong y Lautaro, por fin, daba un triunfo merecido a la albiceleste.

Así jugó Holanda

No se puede decir que Holanda jugase un gran partido. Sería faltar a la verdad. Pero 20 minutos de corazón le valieron para forzar una prórroga que les dio opciones, aunque los penaltis se las quitaron.

Así jugó Argentina

Gran partido del combinado albiceleste, que se vio empañado en los 20 minutos finales por una clara falta de valentía. De la mano de Messi, que dio una asistencia e hizo un gol, los de Scaloni se llegaron a poner 0-2, pero el paso atrás que dieron en los minutos finales permitió a Holanda empujar para terminar empatando un partido que en la prórroga merecieron volver a ganar, aunque al final tuvo que ser en los penaltis.

MVP: Messi

Que le pongan una cumbia porque quiere seguir bailando. Messi fue el mejor jugador del partido, otra vez. Hizo y deshizo a su gusto. Se inventó una asistencia de genio para Nahuel en el primer gol de Argentina y puso la guinda con un tanto de penalti. Tampoco falló el que le tocó en la tanda. Gran partido del ’10’, que quiere ser campeón del mundo.